Reimpreso de (Boletín Ganar Aliados no.50) con permiso de la Central Mexicana de S.G. de A.A., A.C.
Un elemento histórico
Desde tiempos muy remotos el hombre aprendió a fermentar granos y jugos para obtener una sustancia que le provocaba un estado especial. Este estado varía en las diferentes personas
de acuerdo a la cantidad ingerida y de acuerdo a las motivaciones de su ingesta. Nos referimos al estado de intoxicación alcohólica.
Existen reportes escritos del uso de cerveza, vinos y otras bebidas alcohólicas que datan del 3 000 a. de C. Pero el proceso de destilación aplicado a las bebidas fermentadas se remonta a alrededor del año 800 d. de C. Este proceso ha permitido la preparación de licores altamente potentes que se consumen actualmente.
La influencia del alcohol en la sociedad ha tenido gran peso como factor problemático en la conformación y funcionamiento de la familia, individuo y, por ende, de la sociedad. La influencia del alcohol se ha visto reflejada en las diferentes esferas de la historia de la sociedad desde tiempos muy remotos.
Alcoholismo y sentido social
El consumo del alcohol, ha sido reconocido como un factor de integración social y favorecedor de la convivencia. Esto es, el alcohol es una de las bebidas embriagantes que, consumidas con moderación y en los contextos permitidos, reduce la tensión, desinhibe y provoca sensaciones de bienestar. Los bebedores normales disfrutan de las bebidas por esos efectos placenteros y aprecian diferentes calidades de bebidas.
Del mundo hacia México
A nivel global, el uso nocivo del alcohol se encuentra dentro de los principales factores que contribuyen a la mortalidad prematura prevenible en el mundo, apenas por debajo del consumo de tabaco.
El uso nocivo del alcohol se encuentra directamente asociado a fenómenos sociales como la delincuencia, la violencia familiar, el desempleo y el absentismo laboral, y cada vez se tiene mayor conciencia de la influencia que su abuso tiene en la carga de enfermedades infecciosas, particularmente las de transmisión sexual.
De conformidad con cifras de la oms, en el año 2002, el uso nocivo del alcohol fue responsable de más de 2.3 millones de muertes prematuras en todo el mundo, mientras que el costo global de atención de las enfermedades asociadas a este, fue estimado entre 210 mil y 665 mil millones de dólares, lo cual representa entre el 0.6 % y el 1.8 % del producto interno bruto mundial.
En la región de las Américas, se estima que cerca de 5.4 % de las muertes anuales son atribuibles al consumo de alcohol. Así mismo, las estadísticas reflejan cada vez con mayor frecuencia el primer encuentro de niños y jóvenes con esta sustancia, en edades más tempranas.
En México se consume alcohol tanto de manera regular y responsable como de manera excesiva, irresponsable e irrestricta, al grado de que su uso nocivo se encuentra estrechamente relacionado con cinco de las diez principales causas de defunción, y representa la pérdida de años de vida productiva de cientos de miles de mexicanos.
Continuará...